Para un trabajador por cuenta ajena tener un seguro de accidentes puede ser un complemento interesante, pero para un autónomo es necesario.

Invertir en seguridad es imprescindible para cualquier trabajador autónomo. En tu actividad laboral pueden surgir numerosos imprevistos que teniendo un seguro pueden salvarse de la mejor manera.

Un seguro de accidentes no sólo te protege a ti, sino que también protege a tus familiares frente a un accidente que pueda derivar en un fallecimiento, incapacidad absoluta y permanente o incapacidad temporal.

¿Cuándo es obligatorio el seguro de accidentes?

Trabajador autónomo

Si eres un trabajador autónomo con una actividad de riesgo y tienes que contratar personal, el seguro de accidentes es obligatorio.

Generalmente los transportistas, hosteleros y mecánicos requieren de este tipo de seguros de accidentes.

Empleador

Como empleador necesitas un seguro de accidentes que te proteja de los riesgos que puedan sufrir tus trabajadores y suele denominarse seguro de accidentes colectivo.

¿Cuándo es necesario contar con un seguro de accidentes?

Como autónomo debes estar preparado para cualquier imprevisto que pueda surgir.

Invalidez

En caso de invalidez o muerte tras un accidente es importante que dispongas de un seguro para que puedas cubrir a tu familia.

Accidente

Ante un accidente que te impida trabajar además de sufrir tu salud, tus ingresos pueden verse mermados y es entonces cuando necesitarás haber contratado un seguro que te ayude a mantener tus ingresos y los de tu familia, como el seguro de incapacidad temporal laboral.

Necesitarás un seguro de accidentes cuando tanto en tu vida privada o ejerciendo tu actividad laboral tengas un accidente y tras el cual:

• Requieras de hospitalización.
• Tengas una incapacidad temporal.
• Sufras una incapacidad profesional total o permanente.
• Sufras una incapacidad absoluta y permanente.
• Ante un fallecimiento accidental.

¿Cuándo se activa el seguro de accidentes?

En cualquier caso, para que se active un seguro de accidentes debe existir un elemento esencial que es la Causalidad. Tiene que haber una causa y un efecto, la primera debe ser violenta, súbita, externa y ajena a la intencionalidad del asegurado.